lunes, 3 de enero de 2011

Madrid, ya no es Madrid. Es tu persona..



El mundo..
ya no es el mundo..


Libertad, no conozco sino la Libertad de estar preso en alguien.
Cuyo nombre no puedo oìr sin escalofrìo;
alguien por quien me olvido de esta existencia mezquina,
por quien el día y la noche son para mí lo que quiera,
y mi cuerpo y espíritu flotan en su cuerpo y espíritu
como leños perdidos que el mar anega o levanta
libremente, con la libertad del amor,
la ùnica libertad que me exalta,
la ùnica libertad por que muero..

(La Realidad y el Deseo. Cernuda)

2 comentarios:

  1. ..cada vez que una persona se compenetra más y más con otra, ésta pasa a formar parte de la figuración espacial que nuestra percepción reelabora para situarla..para no perderla y poder hallarla.., pero poco a poco su ubicación física e identificación en un lugar es más relativa y difusa, se trasciende..da igual el lugar donde habita, la ciudad, el país o incluso el mundo al que pertenece..y sin embargo, el lugar de referencia se funde con ella..se la identifica con él, pero sólo en tanto en cuanto se halla en él..acaso importa tanto el dónde?..el auténtico emplazamiento se manifiesta entonces en nuestra psique..las almas afines terminan libremente encontrándose en el mismo plano espacial...de este mundo....o de otro..

    “L’âme humaine est faite pour n’être pas seule”.

    (Pierre Teilhard de Chardin)

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  2. Y llegaron los más sabios hombres del reino. Urbanistas, arquitectos, todo tipo de artistas y científicos querían dar forma a la ciudad, querían dar sentido a las piedras. Luego vinieron las guerras, el resurgir desde las cenizas y el renacer, y volvieron los sabios hombres y trabajaron más, pero la ciudad seguía siendo un garabato, un esbozo, un proyecto. Solo bajo la luz de unos ojos inesperados, encontrados, y sin saberlo buscados por todos aquellos hombres sabios, la ciudad cobró vida para él y supo así que por muy lejos que le llevara el viaje, nunca más sería extranjero.

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